He tenido la fortuna de conocer a mucha gente,
de estar con muchos chicos,
sin embargo no he podido tener una relación seria con nadie.
Sólo una vez quise de verdad,
recuerdo que cuando todo termino
con algunos tragos encima y con lágrimas en los ojos
entré a mi casa, cuando mi hermano me pregunto
-¿Qué tienes?
Lo único que respondí fue:
-"Déjame sola, que acabo de perder al amor de mi vida".
No sé si fue el amor de mi vida,
pero sí fue un ser que me hizo sentir feliz
aún no sé si me quería
yo sentí que no me lo demostraba
pero quizá la que no comprendió fui yo,
que a su manera él me quería
pero no es de esos que demuestra con facilidad lo que siente,
no, porque él es único.
Alguna vez creí superado ese asunto,
sin embargo no sé si es que aún no lo olvido
o más bien ya lo olvide pero es capricho,
o quizá me arrepiento de no haber luchado por él.
Que tan difícil podría ser buscarlo y decirle
"A veces te he extrañado, y.. ¿si otra vez lo intentamos?"
Pero, ¿en qué cambiaría?
Y si como dicen, segundas partes nunca fueron buenas,
o más bien es el miedo al rechazo,
a que la respuesta sea NO.
Hoy me siento en el banquillo de la reflexión,
quiero mirar hacia delante y sentirme bien por
los logros que he obtenido, me detengo a pensar en
los fracasos con la esperanza de no repetirlos.
Pienso en él y nada me gustaría más que una segunda oportunidad
pero si esa oportunidad ya no es con él
será con otra persona a quien yo elija
y con quien sienta que puedo ser realmente feliz.
Aún no supero esa separación, he querido hacerme la fuerte
buscando consuelo en otros brazos, pero me es difícil,
hago el intento, sé que lo lograré.
Si algún día que no sea demasiado tarde tú también
decides buscarme estaré ahí para ti,
deseando con todas mis fuerzas amarte y que me ames...
